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| Balsa del Molino Fotografía de Héctor Manuel Quijada Guillamón (2014) |
Origen de la Hila de la Balsa
La construcción de la Balsa del Molino, ya documentada como "Balsa del Concejo" en 1613, fue una solución para que los ricoteños de antaño no continuaran regando por la noche. En ella se almacenaba el agua de la Fuente Grande desde las 18:00 horas a las 06:00 horas, estableciéndose el riego con dos hilas como sistema ordinario durante el día, desde las 06:00 horas a las 18:00 horas: Hila del Molino (procedente del nacimiento) e Hila de la Balsa (saliente de la Balsa del Molino). Ambas se unían a unos veinticinco metros aguas arriba del Partidor de la Romana, permitiendo, a partir de este punto, que algunos agricultores pudieran utilizarlas juntas para irrigar el parcelario con un mayor caudal y en menor tiempo. Para la división exacta de las dos hilas se empleaban los partidores de piedra, también utilizados para desviar el agua hacia la parcela a inundar. |
| Cabecera del sistema hidráulico de la Huerta de Ricote de finales del siglo XIX (rectángulo). Autor: Jesús Joaquín López Moreno (2022) |
Los 11 l/s del agua de la Fuente Grande se distribuían en 14 tandas iguales equivalentes a 14 días, con un total de 336 horas dispuestas desigualmente entre los agricultores (propiedad del agua y de la tierra separadas). Cada tanda comenzaba a las 6:00 horas de cada día y se dividía en 24 horas. A partir de la construcción de la Balsa del Molino, con la creación de la segunda hila, las 12 horas nocturnas se trasladaron al día. Cada tanda la utilizaba cierto número de propietarios, según las horas o fracciones de éstas que cada uno poseía (medias, cuartos y minutos), hasta completarla exactamente. En el año 1919, el reloj de la torre de la iglesia era empleado para que cada propietario o regante supiera la hora en punto o a y media en que debía tomar su agua. Como no marcaba los cuartos, aquellos que sólo disponían de 15 minutos tendrían que regar cada 28 días.
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| Riego a manta realizado con las hilas del Molino y de la Balsa Fotografía de Jesús Joaquín López Moreno (2022) |
Balsa del Molino: una de las zonas de baño
Como en siglos anteriores, el agua acopiada en la Balsa del Molino sigue empleándose como lugar de baño. Por las Ordenanzas de 1919 se conoce que no estaba permitido el baño a menos de tres metros de la salida del agua de la balsa; medida dispuesta para no obstaculizar el agua en el ojo de la Hila de la Balsa. En este documento se recoge que el baño para las mujeres quedaba especialmente establecido en los cárcabos de los molinos y en la bóveda (lavadero) que hay detrás del Molino de Arriba. Para ambos sexos se podía ejercer el baño en la mina del nacimiento, "guardando las debidas y recíprocas distancias, lo que en caso contrario se les denunciará".
Como en siglos anteriores, el agua acopiada en la Balsa del Molino sigue empleándose como lugar de baño. Por las Ordenanzas de 1919 se conoce que no estaba permitido el baño a menos de tres metros de la salida del agua de la balsa; medida dispuesta para no obstaculizar el agua en el ojo de la Hila de la Balsa. En este documento se recoge que el baño para las mujeres quedaba especialmente establecido en los cárcabos de los molinos y en la bóveda (lavadero) que hay detrás del Molino de Arriba. Para ambos sexos se podía ejercer el baño en la mina del nacimiento, "guardando las debidas y recíprocas distancias, lo que en caso contrario se les denunciará".
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| Ricoteños bañándose en la Balsa del Molino Fuente: Mario Tros Bermejo Rojas |
Texto: Jesús Joaquín López Moreno (2015).
GÓMEZ TURPÍN, F., Ordenanzas y Reglamentos para el Sindicato y Jurado de la Comunidad o Heredamiento de Aguas de la "Fuente Grande" o "Hila del Molino" de la Villa de Ricote (Murcia), Ricote, 1919.
